ELLAS, las que dan vida a GAVAL

Buenos días:
Hoy no os voy a hablar de algo material, no quiero hablaros de el salón, sino de algo que no pensaba que fuera a ocurrir cuando me decidí a crear GAVAL. Las clientas, que poco a poco se hacen parte indispensable de mi día a día personal, no solamente el profesional.

Me enseñan valores y me entregan sentimientos que tienen un significado mucho más poderoso que todo lo demás que pueda hacer en el studio (peluquería). Algunas me entregan secretos, otras comparten su vida y sus metas y otras me dan algo mucho más grande: su sabiduría y sus vivencias. Jamás pensé que las respuestas a mis incógnitas estuvieran entre estas cuatro paredes. Hoy me han entregado paz, me han valorado mucho más allá de lo que hago y de lo que soy, me han hecho ver que la vida no tiene por qué seguir unos pasos marcados. La vida la creamos entre todos para todos los demás, nos complementamos de tal manera que conseguimos un equilibrio en el que todos nos hacemos falta. Hoy he aprendido que estoy en este mundo para algo distinto que para lo que me nubla la mente y no me deja ver más allá, hoy me he reconciliado con mis sueños y metas, he descubierto otra manera de vivir mis "faltas" pudiendo rellenarlas de algo mucho más noble y ético. Sé que esta persona que ha venido no lo sabe, ni creo que vaya a leer este blog, pero ojalá llegue a entender algún día todo el bien que me ha hecho con sus palabras y sus vivencias, la edad es un punto a su favor, haber pasado por lo mismo que yo y sentirse orgullosa igualmente de la vida que ha llevado me ha hecho ver que no todos somos iguales y que no todos tenemos los mismos fines en esta vida. Gracias le digo, aunque esas gracias se queden cortas ante todo lo que me ha entregado sin saberlo.

Hay otras personas que viniendo a por un corte y peinado de una hora se han quedado meses a mi lado sin nada más. Me entregan sus logros con felicidad, me hacen partícipes de ellos, algunas creen que soy un talismán o algo por el estilo, pero nada más alejado de la realidad, ellas solas luchan por su vida con todas sus fuerzas, salen adelante de todo aquello que las oprime y me hacen ver que soy una afortunada. Realmente estos días entiendo que soy una gran afortunada por haber caído en este barrio, por haber vuelto a Ourense y por haber realizado mi sueño aquí junto a estas personas. No puedo dejar de dar las gracias, aunque sea en silencio, doy gracias por cada persona que entra triste por la puerta y consigo levantarle una sonrisa en sus labios, doy gracias por los días que yo entro triste por la puerta y consiguen entregarme energías suficientes como para volver a dar gracias. Ellas dan vida a mi sueño, dan vida a GAVAL y por eso jamás podré dejar de agradecérselo.

Debo dar la enhorabuena a las personas que confían en mis manos, en mi producto y en mis palabras, pero sobre todo a las que confían sus sentimientos, secretos y sueños; por que poco a poco todo se va consiguiendo y yo estoy a vuestro lado no solo como estilista sino también como ser humano que vive con vosotras todo lo bueno y malo que os sucede, procuraré poner toda mi energía en que esto continúe siendo así y más gente entre por esta puerta con una gran sonrisa dándome una gran noticia, para que esos días se multipliquen y todos tengamos un evento precioso del que sentirnos orgullos@s, tengamos un puesto de trabajo más que esperado y al fin conseguido, tengamos una enfermedad de la que salimos con éxito y, sobre todo, tengamos muchos más días llenos de sonrisas, demos las gracias porque sea como fuere nos hemos encontrado en el camino. GRACIAS POR ESTAR A MI LADO Y ENTREGARME MUCHÍSIMO MÁS DE LO QUE YO PUEDA JAMÁS DAROS A VOSOTR@S.